El ministro de Defensa de Francia, Jean-Yves Le Drian, confirmó ayer viernes 1de enero durante una visita a las tropas francesas en una base aérea de Jordania, que se ha cursado un pedido a Lockheed Martin par adquirir cuatro aviones de transporte C-130J Super Hercules. La operación asciende a unos 650 millones de euros, según informa el diario Liberation.
Desde la pasada primavera la Dirección General de Armamento tenía sobre la mesa un dosier para adquirir cuatro C-130J a la vista de los retrasos que experimenta la producción del Airbus A400M después del accidente que sufrió uno de ellos en Sevilla cuando efectuaba el primer vuelo. Además, par Francia es un contratiempo que algunas capacidades del avión no se hayan concretado, como el reavituallamiento en vuelo y la defensa armada del aparato.
La solución al dosier se había anunciado para final de este año, como así ha sucedido. La adquisición de los aviones contaba con una partida presupuestaria. En la decisión ha pesado el gran número de misiones que están realizando los aviones franceses de transporte militar, una parte de las cuales se efectúan con los vetustos aviones Transall.
El precio básico de un C-130J ronda los 90 millones de dólares. Pero la última versión del avión comporta que sus motores, aviónica y pilotaje son diferentes al modelo anterior, lo cual requiere adquirir la formación de pilotos, un simulador para las prácticas de vuelo y la logística suplementaria. Además, dos aviones tendrán capacidad para suministrar combustible a otras aeronaves en vuelo.
