La Asociación International de Transporte Aéreo (IATA) solicita a AENA, proveedor de servicios de navegación aérea en España, y a los controladores de tráfico aéreo que tomen todas las medidas necesarias para evitar la huelga prevista. Concretamente, Giovanni Bisignani, Director General de IATA y CEO solicita a los controladores de tráfico aéreo que acepten la oferta de AENA de entrar en un proceso de arbitraje para resolver el conflicto.
“Este no es momento para huelgas. El arbitraje es una forma justa, abierta y neutral de resolver las diferencias entre AENA y los controladores aéreos. Esto evitará el impacto negativo de una huelga sobre la economía española, dijo Bisignani. “La crisis financiera global y la continua crisis por la deuda en Europa están desafiando a los gobiernos, empresarios y empleados a cambiar el sistema para construir una economía más fuerte. Con un 20% de desempleo, España no es un simple espectador. La economía española es débil y no puede afrontar los efectos devastadores de una huelga de controladores aéreos especialmente en el sector turístico, dijo Bisignani.
«Esto no es sólo teoría. Cuando gran parte del espacio aéreo europeo estuvo cerrado durante varios días como resultado de la crisis por las cenizas del volcán, las compañías registraron pérdidas de 1.800 millones de dólares y el coste en la economía se estimó en casi 5 mil millones. Debido a la amenaza de huelga, los viajeros están cambiando sus planes de viaje para evitar usar el espacio aéreo español. Esto implica grandes pérdidas para la economía española con sus posibles consecuencias sobre el empleo. Aceptar recurrir al arbitraje en vez de amenazar con ir a la huelga restablecería la confianza de los pasajeros” señaló Bisignani.
Después de décadas de discusión, Europa está finalmente progresando hacia el Cielo Único Europeo (Single European Sky). Unir el espacio aéreo Europeo es crítico. Cada año las eficiencia generadas permitirán ahorrar cerca de EUR 5 mil millones en costes, eliminar millones de minutos de retraso y reducir las emisiones de CO2 en unas 16 millones de toneladas. Muchos de los puntos de conflicto con los controladores aéreos están asociados con los beneficios que pueda sacar España del Cielo Único Europeo.
“Durante la última década, cada industria ha tenido que enfrentarse al reto de mejorar sus eficiencias. Las compañías aéreas han mejorado su productividad cerca del 63% pero la quiebra de Mexicana demuestra que la industria es frágil y se necesitan más cambios.
Los cambios en la industria de las telecomunicaciones, la automoción o las farmacéuticas han sido masivos, muchas veces dolorosos, pero absolutamente necesarios para sobrevivir. AENA debe cambiar para asegurar que España logre una conectividad aérea financieramente sostenible para potenciar la economía. El peso de este cambio incluye a los controladores”, dijo Bisignani.
Edición: José Fernández