El mes de agosto, temporada alta para agencias de viajes y compañías de vuelo, está pasando factura a Ryanair, aerolínea irlandesa de bajo coste. Si hace apenas una semana la imagen de la compañía se veía afectada por el anuncio de aterrizajes de emergencia por déficit de combustible y las críticas de pilotos alemanes y españoles, hoy El Economista publicaba que el pasado 19 de agosto Ryanair mantuvo encerrados durante horas en un avión a 38 grados a los pasajeros del vuelo Eindhoven-Mallorca a causa de un retraso. / Esta información, que se ilustra con un vídeo filmado dentro del avión, está publicada en www.lavanguardia.es.