El Aeropuerto de Palma de Mallorca ha iniciado esta semana la remodelación de 17 de sus 18 actuales cintas de recogida de equipajes. El objetivo es reforzar su seguridad evitando que el equipaje retorne al lado aire una vez ha sido depositado en la cinta para su retirada por parte del pasajero. Gracias a esta actuación, las cintas de recogida de equipaje no comunican el lado tierra (edificio Terminal) con el lado aire, donde se sitúa el patio de carrillos al que llegan las maletas después de ser descargadas de las bodegas de los aviones.
En una primera fase, que se desarrollará desde hoy hasta el 2 de julio, se actuará en los hipódromos (cintas) grandes, que son los 1, 3, 5, 7, 9, 10, 12 y 14. En estas cintas se va a cambiar un tramo que discurre por el patio de carrillos para reducir atascos y acelerar el proceso de entrega de maletas.
En la segunda fase, del 5 de julio al 19 de octubre, se realizará la modificación del trazado de los hipódromos pequeños (2, 4, 6, 8, 11, 13 y 15). Y por último, del 18 al 29 de octubre, se cambiará la configuración de los dos últimos hipódromos, 17 y 18, y se instalará una nueva cinta de recogida de equipajes especiales, con lo que el aeropuerto pasará a tener un total de 19 cintas.
Además, se instalarán cámaras de vigilancia y detectores de presencia, conectados con el centro de vigilancia, junto a los huecos que comunican el patio de carrillos con la sala de recogida para evitar que se acerquen personas no autorizadas. El presupuesto total de esta actuación es de 1.072.256 euros.
Edición: JFG