Un avión de Ryanair procedente de Valencia y con destino Milán (Italia) realizó ayer un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto italiano de Cristoforo Colombo, en Génova, por un fallo en el sistema de presurización, según informó la compañía aérea. Ryanair se excusó «con todos los pasajeros por cada inconveniente causado». Al parecer, se vivieron escenas de pánico.
De acuerdo con los procedimientos operativos estándar, el comandante desplegó las máscaras de oxígeno e inició un descenso de emergencia controlado a una altitud sin presión. Después, el avión «aterrizó con normalidad en Génova aproximadamente a las 9.50 hora local». Cuando se produjo la despresurización el avión se encontraba a más de 35.000 pies. Tuvo que descender en picado hasta los 9.000 pies (unos 3.000 metros de altura), en 7 minutos.
Los pasajeros han sido trasladados en autobús a Milán, con el objetivo de minimizar los inconvenientes del retraso, mientras que los ingenieros de Ryanair están ya inspeccionando la aeronave, agrega. Fuentes de Ryanair dijeron que dos de los 93 pasajeros del vuelo FR4632 han sido trasladados a hospitales cercanos por precaución para que se les efectúe una revisión y descartar cualquier tipo de lesión. Se trata de dos mujeres que han acusado dolores en el tórax.
