Airbus, con el apoyo de EADS Innovation Works, ha inaugurado el primer edificio invisible en las instalaciones de Airbus en Toulouse, anexas al aeropuerto de Blagnac. EADS y Airbus construirán el hangar C65 en el aeropuerto equipando el edificio con paneles de aluminio especialmente moldeados. Estos paneles impiden que el edificio entorpezca el sistema de instrumentos de aterrizaje (ILS) del aeropuerto, que permite aterrizar en condiciones de visibilidad reducida.
Por razones de seguridad, el permiso de planificación del edificio no se habría concedido sin estas modificaciones. Las grandes fachadas de los edificios representan un problema para los sistemas de aterrizaje de los aviones porque reflejan en las pistas las ondas de radio entrantes como si fueran un espejo. Esas perturbaciones hacen que los aviones se desvíen del eje de la pista. Por este motivo, está prohibida la construcción cerca de las pistas salvo que se pueda demostrar que el edificio es «invisible».
Sin embargo, no es factible aplicar las tecnologías furtivas o de «invisibilidad» convencionales para absorber las ondas entrantes porque el coste sería prohibitivo. En cambio, la solución aplicada en Toulouse recurre al fenómeno de difracción para redirigir las ondas fuera de las pistas. Es el mismo efecto que produce los colores iridiscentes que son visibles cuando se expone un CD a una fuente de luz.
Empleando ELISE, una avanzada herramienta de simulación ILS desarrollada por Airbus Engineering, EADS Innovation Works y la Universidad de Aviación Civil francesa ENAC, incluso fue posible demostrar que solo sería necesario tratar los 10 metros de la parte superior del edificio, lo que proporcionaría una solución más barata.
Jean Botti, Director Técnico de EADS, afirma: «La exitosa terminación de estas instalaciones de Airbus es un ejemplo de nuestro compromiso con el desarrollo de soluciones técnicas únicas para nuestros clientes y la industria aeroespacial».
Airbus ProSky venderá esta tecnología con la asistencia del soporte técnico de EADS Innovation Works. Paul-Franck Bijou, CEO de Airbus ProSky, comenta: «Al diseñar edificios que no producen reflejos, hasta 100 kilómetros cuadrados de terrenos no aptos para construcción en aeropuertos podrían transformarse en espacio disponible para construir edificios de terminales, hangares de mantenimiento o incluso otras instalaciones fuera del perímetro del aeropuerto, como sedes para exposiciones, hoteles y estacionamientos de varias plantas para vehículos».