El nuevo hangar de mantenimiento de Iberia en Barcelona, que la compañía inauguró el pasado 18 de octubre, será el escenario de la ceremonia de despedida a Benedicto XVI, que se celebrará el próximo 7 de noviembre.
Después de este acto, la compañía española se encargará de trasladar al Pontífice a su regreso a Roma. Iberia también se ocupará de llevar al Papa desde Santiago a Barcelona el día anterior y, para ello, ha programado un Airbus A321, que tiene el nombre de «Delta de Llobregat».
Durante el regreso de Benedicto XVI de Barcelona a Roma, Antonio Vázquez –Presidente de Iberia-, le obsequiará con una maqueta de plata del Rohrbach Roland, el primer avión que tuvo la compañía, con capacidad para 10 pasajeros, y que se estrenó en la ruta Madrid- Barcelona.
Para los vuelos del Pontífice de Santiago a Barcelona y desde Barcelona a Roma, el chef Sergi Arola, que colabora con Iberia, ha diseñado un servicio gastronómico en el que se incluyen productos gallegos y catalanes; y la selección de vinos ha sido realizada por el Club TodoVino –colaborador habitual de Iberia-. Además, se empleará lencería de mesa elaborada artesanalmente con hilo natural, encaje de bolillos, y bordada con el escudo del Papa.
En los dos vuelos se escuchará una selección musical que abarca tanto los clásicos españoles (Joaquín Rodrigo, Granados, Albéniz…), como otras preferencias de Benedicto XVI; en concreto Mozart y una grabación en directo de los años sesenta, cedida por RNE, en la que se recogen las voces de los niños del Coro de la Catedral de Ratisbona, dirigido durante 30 años por Georg Ratzinger, hermano del Papa.