El Colegio Oficial de Ingenieros Aeronáuticos de España (COIAE), entregará mañana el “Premio innovación aeronáutica 2018” en un acto que comenzará a las 18 horas, en el Instituto de la Ingeniería de España.
El vocal del Colegio Oficial de Ingenieros Aeronáuticos de España y de la Asociación de Ingenieros Aeronáuticos de España (AIAE), José Manuel Hesse, abrirá la jornada, compuesta por una mesa redonda sobre innovación en la que participarán los galardonados con el “Premio innovación 2017”: Pablo Flores de Drone Hopper, Alejandro Rubio de SiriumAerotech y Marc Chicharro de AeroclApp. A continuación, Jorge Almazán, agente europeo de patentes y Luis Dueñas, experto de la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM), impartirán una interesante charla bajo el título “Innovación, propiedad intelectual y patentes”. Alrededor de las 19:45 horas se procederá a la entrega del “Premio de innovación aeronáutica 2018”. La clausura correrá a cargo de José Manuel Hesse.
El pasado mes de junio, el COIAE reconoció al ingeniero aeronáutico Antonio López Lázaro con el “Premio innovación aeronáutica 2018” por su modelo para ayudar a simular el impacto sobre los costes de las aerolíneas al implantar la utilización de biocombustibles. El proyecto nació con el objetivo de acelerar el análisis e implementación de incentivos y regulaciones en materia de biocombustibles, dentro del transporte aéreo, que aseguren el cumplimiento de los objetivos medioambientales globales aplicables.
Diseñado para aquellos organismos públicos o privados involucrados en el proceso de un modelo de estimación de costes en aerolíneas. Está compuesto por tres submodelos: un modelo de tráfico que estima el rendimiento anual de los operadores en cada una de sus rutas; un modelo de biocombustible que se encarga de estimar los precios, las emisiones y las regulaciones de los biocombustibles (con especial atención a porcentaje de mezcla), y un modelo de costes operativos que estima la estructura de costes del operador. Los datos agregados permiten simular políticas e impactos asociados con el correspondiente análisis de sensibilidad de factores principales como: precio del keroseno, precio de los biocombustibles, evolución del tráfico, tecnología/consumo, tipo de aeronaves, rutas, modelos de negocio, etc.
Además, el COIAE reconoció como segundo premio a dos proyectos: El diseño de un prototipo de aeronave monoplaza y un cubrimiento de polímero para torres de infraestructura.
-El ingeniero aeronáutico, Fernando Griñán, ideó un cubrimiento de polímero, poroso o continuo, para toda tipología de torres de infraestructura con tres fines: la exposición de publicidad; la protección antianidamiento y la mimetización e integración en el entorno”. Patente para el cubrimiento de todo tipo de torres de telecomunicaciones o eléctricas, con la finalidad de exponer publicidad en ellas, protegerlas o bien mimetizarlas con el entorno, incluyendo la ingeniería de su viabilidad mediante un novedoso programa para establecer las cargas aerodinámicas que se producen con los correspondientes cubrimientos, de forma inmediata.
-Por otro lado, el ingeniero aeronáutico, Carlos Manterola, también fue reconocido con el segundo premio por el proyecto de diseño del desarrollo y la construcción de un prototipo de la primera aeronave monoplaza de tres alas unidas con propulsión eléctrica. Denominado “TAUPE”, dispone de ciertas ventajas con respecto a una convencional: más rigidez estructural, más pequeña, menos resistencia aerodinámica, más maniobrabilidad y estabilidad, menos coste de operación y construcción, y más ecológica. El objetivo final sería lograr un nuevo diseño en aeronaves, aplicable tanto al ámbito civil como militar, para el transporte de personas o cargas con más alcance, maniobrabilidad y más económica.
El COIAE creó en 2017 el “Premio innovación aeronáutica” con el objeto de servir de apoyo al emprendimiento y el desarrollo de la I+D de los ingenieros aeronáuticos, y la industria en general. El jurado está compuesto por miembros de junta del COIAE/AIAE, representantes de sus delegaciones y de la industria aeronáutica.
Tiene en cuenta los siguientes aspectos: la creatividad, los beneficios, las técnicas innovadoras aeronáuticas aplicadas o por aplicar, el impacto en la mejora de la ingeniería aeronáutica, el uso de nuevas herramientas digitales, la capacidad de continuidad en años venideros, la posibilidad de importación fuera de España y el Business case del proyecto.
El premio consiste en la difusión del proyecto innovador, así como la entrega de 750 euros para el primer premio y 250 euros, el segundo.