Las víctimas del accidente sufrido ayer por de un avión Sukhoi SuperJet 100 de Aeroflot en el aeropuerto Sheremétievo de Moscú se elevan a 41 personas de las 78 que se encontraban a bordo, incluida la tripulación. Un nuevo vídeo divulgado de la catástrofe parece indicar que el avión efectuó una toma muy dura, lo cual podría haber desencadenado el incendio.
Según las informaciones que se van divulgando del siniestro, el avión, que entregó el fabricante a Aeroflot en agosto de 2017, recibió el impacto de un rayo, lo cual motivó que la tripulación decidiese volver Sheremétievo. Al parecer el aparato sufrió una avería del sistema eléctrico.
UPDATE: Aeroflot #SU1492 footage shows the Sukhoi Superjet bounced on initial touchdown followed by an even harder 2nd ground contact during which the undercarriage collapsed and a fire broke out. There is no visible fire before that point. pic.twitter.com/eIaqmJk8uC
— JACDEC (@JacdecNew) 5 de mayo de 2019
Si se confirma esta circunstancia, el aterrizaje habría sido muy complicado. En el segundo intento, el avión habría realizado una toma muy dura, lo cual hizo que el avión se elevase. Al volver a contactar con la pista se desprenden chispas de la parte trasera de fuselaje, que también impacta contra la pista, produciéndose el incendio. No se descarta que el tren de aterrizaje principal se rompiese, lo cual habría favorecido la fuga de combustible y el incendio.
Otra circunstancia que podría haber incrementado el número de fallecidos es que algunos pasajeros tardaron más tiempo del necesario en evacuar el aparato al pretender recoger su equipaje de mano.