Someten el Sentinel-6A a un test de impacto sonoro que simula el ruido del lanzamiento

Airbus

El satélite de observación de la Tierra Sentinel-6A se está probando a todo volumen. Los ingenieros espaciales de Airbus están “bombardeando” con sonido al satélite más reciente del programa europeo de medioambiente y seguridad Copernicus dentro de una cámara especial del Centro de Pruebas Espaciales en Ottobrunn, cerca de Múnich. La prueba de ruido acústico simula el impacto sonoro al que se verá sometido el satélite durante el lanzamiento del cohete.

La cámara, que ocupa una superficie de unos 100 m2 y está equipada con enormes altavoces, se sella herméticamente durante las pruebas. Estas pruebas consisten en cuatro ráfagas de sonido de 60 segundos que se disparan hacia el satélite con una intensidad creciente. En su punto máximo, Sentinel-6A recibirá el impacto de 140 decibelios (dB).

A modo de comparación, un sonido de alrededor de 50 dB es agradable al oído, a unos 100 dB el ruido empieza a ser molesto y en torno a los 120 dB resulta doloroso. Un martillo neumático o una motosierra producen alrededor de 110 dB y un incremento de 10 dB supone duplicar el nivel sonoro que se percibe.

Sentinel-6 de Copernicus es una misión de altimetría de los océanos que proporcionará mediciones continuas de la topografía marina durante la próxima década. Sentinel-6 incorpora un altímetro radar que suministrará puntualmente observaciones muy precisas de la altura de la superficie de los mares a escala global.

Esta información es esencial para llevar a cabo una monitorización continua de los cambios del nivel del mar, un indicador clave del cambio climático que también es fundamental en el campo de la oceanografía. Sentinel-6 cartografiará cada diez días hasta el 95% de los océanos libres de hielo en el planeta y proporcionará información vital para la seguridad marítima acerca de las corrientes oceánicas, la velocidad del viento y la altura de las olas.

Se han desarrollado dos satélites Sentinel-6 para el Programa Europeo Copernicus destinados al medioambiente y a la seguridad bajo la dirección industrial de Airbus. Aunque Sentinel-6 forma parte de la familia de misiones Copernicus de la Unión Europea, para su ejecución cuenta también con la cooperación internacional de la ESA, la NASA, la NOAA y EUMETSAT.

Sentinel-6A será, a partir de noviembre de 2020, el primero de los dos satélites Sentinel-6 que continuará recopilando mediciones por satélite de la superficie de los océanos, una tarea que comenzó en 1992. Está previsto que Sentinel-6B le siga a partir de 2025. Sentinel- 6 se basa en el legado de la serie de satélites de topografía oceánica Jason y de las misiones de la ESA CryoSat-2 y Sentinel-2 y también GRACE, fabricados bajo la dirección industrial de Airbus.

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