El fabricante aeronáutico estadounidense Boeing anunció la apertura de su sexto centro de investigación tecnológica fuera de EE.UU. este mismo año en Sao Paulo, una plataforma que estará dedicada a las áreas de biocombustibles y gestión del tráfico aéreo. El vicepresidente de investigación y tecnología de Boeing, Al Bryant, precisó que el centro también se ocupará de estudiar el uso de metales avanzados para la fabricación de los aparatos, así como tecnologías de apoyo y servicios.
El ejecutivo, quien no ofreció una cifra cerrada de inversión, explicó que cada uno de los cinco centros que Boeing tiene fuera de Estados Unidos conllevó una inversión inicial de entre cuatro y cinco millones de dólares anuales.
Boeing dispone de centros similares en Madrid, donde se desarrolla, entre otros, tecnología para sistemas aéreos no dirigidos, la India, China, Australia y Rusia.
Asimismo, añadió que las áreas escogidas son aquellas para las que la firma considera que Brasil ofrece oportunidades y precisó que inicialmente se tratará de un centro de oficinas aunque no descartó que pueda apostarse por la instalación de laboratorios en el futuro.
En su opinión, el grupo que desde 1932 vende aviones al país, tiene el objetivo de establecerse a largo plazo y crear tecnología “en Brasil, por Brasil y para Brasil”.
Mientras, la presidenta de Boeing en Brasil, Donna Hrinak, explicó que la instalación del centro abarca diversas áreas y está “mucho más allá de cualquier decisión del Gobierno brasileño sobre los F-18″.
Con estas palabras, la que fuera embajadora de EE.UU. en Brasil entre 2002 y 2004 respondía a una posible relación entre la apertura de ese centro y una licitación del Gobierno brasileño para renovar su flota militar.
Boeing compite con sus cazas Súper Hornet F/A-18 con la francesa Dassault, que presenta el Rafale, y la sueca Saab con sus Gripen NG en un concurso del Gobierno para adquirir 36 cazabombarderos que sustituirán los actuales aviones de combate de la Fuerza Aérea Brasileña.