El periodista y activista bielorruso Roman Protasevich, que se había exiliado del país, viajaba el pasado domingo 23 de mayo a bordo de un vuelo de Ryanair de Atenas a Vilna, la capital de Lituania, cuando se produjo una presunta amenaza de bomba.
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Esta circunstancia obligó a la tripulación del avión a aterrizar de emergencia en Minsk, y donde las autoridades bielorrusas esperaban al periodista. Además, un caza Mig voló junto al avión para forzar el aterrizaje. El suceso se produjo cuando el avión sobrevolaba Bielorrusia. Una vez en tierra, el opositor al presidente Lukashenko y su novia fueron arrestados. En el vuelo podrían viajar tres espías del régimen ya que posteriormente no continuaron el vuelo.
