El fabricante europeo de aviones turbohélice ATR ha obtenido de la Agencia Europea de Seguridad aérea (EASA) la certificación «ETOPS de 120 minutos» para los ATR de la nueva serie 600. Esta certificación ETOPS (Extended-range Twin-engine Performance Standards) permite poder cubrir con un solo motor distancia de hasta 120 minutos de vuelo hasta un aeropuerto en el que poder aterrizar.
Con la certificación «ETOPS 120 minutos» se aseguran enlaces directos entre dos aeropuertos situados a distancias máximas que equivalen a cuatro horas de vuelo (dos horas de distancia máxima de vuelo desde el aeropuerto de salida más dos horas como máximo hasta el aeropuerto más cercano en el que poder aterrizar.
Los ATR 600 son los únicos turbohélices regionales que tienen esta certificación, que tiene gran importancia en determinados trayectos, como la Polinesia francesa o en Siberia, donde las distancias entre los dos aeropuertos más próximos pueden llegar a casi 2.000 kilómetros. La certificación que comentamos permitirá establecer planes de vuelo más directos entre los aeropuertos de salida y destino final, con ganancias considerables respecto del tiempo del trayecto, el cosumo de carburante y las emisiones de gases.
