Una de las primeras consecuencias aeronáuticas de la elección el pasado 8 de noviembre de Donald Trump como presidente de los Estados unidos es el establecimiento de una zona de Restricción de Vuelo Temporal (TFR; Temporary Flight Restriction), que en España se conoce por las siglas NOTAM, entorno al espacio aéreo de la emblemática Torre Trump que el magnate norteamericano tiene en la 5a Avenida de Manhattan, en Nueva York.
La restricción de sobrevuelo, que aparece publicada en la web de la Autoridad Federal de Aviación (FAA), comenzó el día 10 y estará en vigor hasta el próximo 21 de enero, primer día que empezará a ejercer el cargo desde la Casa Blanca, en Washington, según informa la web Flyer. Trump jurará o prometerá el cargo de presidente de EEUU el 20 de enero.
Al principio el TFR que se decretó cubría un radio de dos millas naúticas a partir del rascacielos de Trup, pero después, a fin de permitir mantener el corredor de vuelo visual sobre el río Hudson, se recortó la superficie que se podía sobrevolar en aproximadamente un kilómetro sobre el río.
El sobrevuelo del río Hudson es una popular ruta turística. De hecho el TFR permite las operaciones de despegue y aterrizaje de helicópteros e hidroaviones, así como de ambulancia aérea, policía y servicios de emergencia, en los helipuertos que se encuentran junto al cauce del Hudson, y en los que operan empresas de vuelos turísticos.