Aeroméxico, Boeing y el Gobierno de México se congratulan en participar en un logro histórico para la aviación mundial, al anunciar la realización ayer 1 de agosto del primer vuelo transcontinental comercial en un avión de cabina ancha impulsado por motores General Electric con biocombustible. La Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) a través de Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA), en coordinación con Aeroméxico y el fabricante de aeronaves Boeing, al cubrir la ruta México – Madrid con más de 250 pasajeros a bordo.
El vuelo se realizó con una mezcla de 70% combustible tradicional y 30% de biocombustible, suministrado por ASA. La bioturbosina está compuesta por una mezcla de turbosina derivada del petróleo, así como de hidrocarburos obtenidos de la planta oleaginosa Jatropha Curcas, la cual se cultiva en varias regiones del mundo incluyendo México.
Aeroméxico, como socio de la alianza con SkyTeam y del Grupo de Usuarios de Combustibles Sustentables de Aviación (SAFUG), muestra con este vuelo su compromiso de promover el desarrollo de combustibles alternativos de aviación bajos en carbono a lo largo de su ciclo de vida.
Se debe recalcar que a pesar de aún no es un combustible financieramente viable por su alto costo de producción, a partir de este vuelo y en coordinación con ASA, Aeroméxico implementará un programa de vuelos comerciales con biocombustible a destinos como San José, Costa Rica a lo largo de un año con equipos Boeing 737-700 propulsados por motores CFM56-7B22.
Boeing Commercial Airplane, ha señalado en reiteradas ocasiones que el desarrollo de biocombustibles sostenibles a largo plazo es una de las áreas prioritarias para dicha empresa y que desde hace tiempo colabora con otros actores de la industria, instituciones académicas, gobiernos y organizaciones ambientales a fin de acelerar la disponibilidad de combustibles sostenibles y con bajas emisiones de carbono.
En octubre de 2009, Boeing y ASA firmaron un memorando de entendimiento para realizar una serie de estudios y formalizar esta colaboración mediante un compromiso de trabajo a través de la Mesa Redonda sobre Biocombustibles Sustentables, una iniciativa multisectorial global.
Asimismo, diversas autoridades internacionales como la Sociedad Americana de Prueba de Materiales de Estados Unidos (ASTM) y el Departamento de Aeronavegabilidad de la Aviación Civil española, en reiteradas ocasiones, han informado que este combustible de bajo carbono cumple cabalmente con todos los requerimientos actuales de seguridad.