El Reino Unido ha decidido, de común acuerdo con las autoridades yemenitas, suspender los vuelos directos entre Yemen y Reino Unido, según declaró ayer el primer ministro británico Gordon Brown. La medida se produce casi un mes después del atentado frustrado de un nigeriano a bordo de un avión que voló de Holanda al Estados Unidos. Este individuo estuvo días ante del atentado en Yemen, país que por sus débiles estructuras sociopolíticas y su subdesarrollo vive desde hace años una fuerte penetración de los terroristas de Al Qaeda.