El Aeropuerto de Valencia ha instalado y ha puesto en servicio hoy seis desfibriladores semiautomáticos a lo largo del edificio terminal, que junto al equipo ya existente en el botiquín suman siete dispositivos perfectamente equipados.
Además de mejorar, más aún si cabe, la calidad de la atención sanitaria, esta iniciativa supone una garantía de asistencia rápida y vital para cualquier pasajero, trabajador o usuario que pudiera sufrir una parada cardiorrespiratoria puesto que permiten aplicar unos primeros auxilios fundamentales y minimizar así las consecuencias ante este tipo de situación.
Los nuevos desfibriladores están situados en la zona de facturación, servicios, preembarque, embarque control de seguridad y llegadas (véase plano adjunto); dichos equipos han sido instalados en lugares visibles y debidamente señalizados con el objeto de facilitar su localización y reducir los tiempos de respuesta.
Se trata de desfibriladores externos automáticos dotados de la tecnología más avanzada y de uso muy sencillo: el propio aparato determina, en función del ritmo cardiaco, la necesidad o no de aplicar una descarga al paciente hasta los pasos que han de seguirse en cada momento.
Están fabricados con acero de alta resistencia y poseen paneles de información intercambiable. Además de interfono y sistema de alarma, las columnas de rescate están dotadas de un sistema de autochequeo en tiempo real que emite un aviso de alarma en caso de incidencia.
Por otro lado, los siete equipos cuentan con una fuente de alimentación autónoma para que puedan ser utilizados en caso de posibles cortes de suministro de energía.
Formación de empleados
Una treintena de trabajadores del Aeropuerto de Valencia han recibido formación con el objetivo de adquirir los conocimientos teóricos y prácticos necesarios para la correcta aplicación de los desfibriladores.