La Ministra de Fomento, Ana Pastor, asistió ayer al inicio de las obras de la lanzadera ferroviaria al Aeropuerto de Barcelona-El Prat, un proyecto con una inversión de 268,4 millones de euros, y que tras cinco años parado se ha puesto en marcha gracias al esfuerzo y la colaboración entre Fomento y la Generalitat.
Pastor ha destacado que “el comienzo de la obra es una realidad tangible”, una vez que ésta se había adjudicado en 2010 pero nunca se llegó a iniciar. Gracias al esfuerzo por encontrar la fórmula más adecuada y viable para hacer realidad esta actuación, que demandan los ciudadanos de Catalunya, “por fin hoy se pone en marcha este proyecto” del que se estima se beneficiarán entre 7 y 9 millones de viajeros anuales, y que convertirá a El Prat en uno de los aeropuertos mejor comunicados de Europa, ha afirmado la ministra.
El tren lanzadera tendrá parada en las dos terminales, de forma que quedarán conectadas entre sí y con la red de Cercanías de Barcelona. Sin olvidar que se reducirán los tiempos de viaje actuales entre la estación de Barcelona Sants y la terminal T2 y el recorrido entre la terminal barcelonesa y la T1 será de aproximadamente 19 minutos.
La titular de Fomento ha recordado que el Aeropuerto de Barcelona-El Prat es uno de los 10 principales aeropuertos de Europa. En 2014 tuvo un récord de viajeros, 37,5 millones, un 6,7% más respecto a 2013. Y en 2015, ha señalado la ministra, va camino de superar su propia marca, ya que al cierre del primer semestre contabiliza más de 18 millones de pasajeros, un 4,8% más que en el mismo período de año anterior.
En ese sentido, la ministra se ha mostrado convencida de que “el efecto combinado del Tren-lanzadera y el Metro va a proporcionar una accesibilidad óptima al aeropuerto, que se va a traducir en un incremento adicional del número de pasajeros”.
Pastor ha afirmado que “el Gobierno de la Nación no está escatimando ningún recurso para seguir proporcionando a los ciudadanos las infra-estructuras, los equipamientos y los servicios que necesitan para que Catalunya siga creciendo y prosperando” y ese compromiso del Gobierno, y en particular del Ministerio de Fomento, con los ciudadanos de Catalunya, está avalado por los datos objetivos y por los hechos, una vez que Catalunya es la segunda Comunidad Autónoma con mayor dotación presupuestaria por parte del Grupo Fomento durante el conjunto de la presente legislatura, con 8.895,6 M€.
Descripción de las obras
El nuevo acceso ferroviario al Aeropuerto tendrá una longitud total de 4.495 m y se iniciará en el enlace con la línea de ancho convencional Barcelona-Tarragona, discurriendo en doble vía hasta la terminal T1, con una parada intermedia en la terminal T2.
El elemento más destacado de la nueva infraestructura será un túnel de 3.385 m, de los que 2.830 m se excavarán con tuneladora, y los restantes corresponderán a tramos entre pantallas.
El túnel, con un diámetro de 10,6 m y una profundidad máxima de 25,8 m, tendrá una longitud de 1.364 m en su primer tramo hasta la estación intermodal que se situará en la terminal T2, y 1.466 m desde ésta hasta la T1, tras discurrir bajo pistas. El proyecto también contempla la adecuación de los gálibos interiores a las normas europeas de interoperabilidad.
La tuneladora será del tipo EPB (Escudo de Presión de Tierras), de similares características a la utilizada para la construcción de los túneles de Barcelona, Girona y Montcada i Reixac de la Línea de Alta Velocidad Madrid-Barcelona-frontera francesa.
Este tipo de tuneladora dispone, entre otros elementos, de una cabeza giratoria equipada con instrumentos de corte, una serie de aberturas por donde se extraen las tierras excavadas para su evacuación y unos cilindros hidráulicos que, apoyados en la estructura ya construida, empujan la cabeza giratoria contra el terreno, avanzando la perforación. Según va avanzando, la misma máquina va colocando las dovelas (piezas que encajadas entre sí forman la estructura circular de hormigón del túnel). En total se colocarán 2.855 dovelas.
Otras actuaciones destacadas serán la ejecución de las estructuras de la estación intermodal de la terminal T2, así como la construcción de cinco salidas de emergencia y del pozo de extracción de la tuneladora.
Para la ejecución de las obras, se realizará un tratamiento de más de 134.000 m3 de tierras con jet-grouting para la compactación y mejora de las propiedades del terreno, se utilizarán más de 24.000 t de acero y 48.700 m3 de hormigón, y se ejecutarán más de 50.000 m2 de pantallas, que supondrán la excavación de más de 316.000 m3 de tierras.
Durante los trabajos se llevará a cabo un plan de control y auscultación mediante sistemas de instrumentación para garantizar la absoluta seguridad de las estructuras, de los terrenos y de otras infraestructuras. Este plan es similar al que Adif ha adoptado en la construcción de nuevas obras, como los túneles de la Línea de Alta Velocidad o las estaciones de Passeig de Gràcia y La Sagrera-Meridiana, en Barcelona.
Las obras, que tienen un plazo de ejecución estimado de 33 meses, serán ejecutadas por la Unión Temporal de Empresas formada por las constructoras Copcisa, Ferrovial-Agromán y Sacyr.
En paralelo a la construcción de la nueva infraestructura, está previsto que próximamente se licite el correspondiente contrato para la ejecución de la superestructura, la señalización, la instalación de las comunicaciones y la explotación de la línea.