La Base Aérea de San Javier y el Aeropuerto de Murcia-San Javier, siguiendo la normativa de la OACI (Organización de Aviación Civil Internacional) y de acuerdo con los procedimientos internos de emergencia de la propia base, su Plan de Emergencias y el Plan de Autoprotección del Aeropuerto, realizaron la semana pasada un simulacro de emergencia organizado y coordinado de forma conjunta.
El objetivo de este ejercicio es comprobar y evaluar los procedimientos de actuación y coordinación, así como analizar la eficacia de los mismos y el grado de conocimiento e integración de todos los colectivos implicados en la atención de una emergencia aérea.
El ejercicio (denominado Ficticia 17) ha consistido en la simulación de un accidente aéreo en el que una aeronave militar C-101 impacta contra un avión civil de transporte de pasajeros, tipo A319, que se encontraba estacionado en la plataforma de aeronaves y se disponía a proceder al desembarco de los pasajeros.
La tripulación del C-101 estaba formada por dos tripulantes y la aeronave comercial transportaba 70 pasajeros y 4 personas de la tripulación.
El supuesto ha comenzado en el momento en el que la torre de control ha detectado el impacto y ha declarado alarma general. A partir de ese momento se ha alertado a los servicios de extinción de incendios del Aeropuerto y de la base aérea y se han activado los puestos de mando, iniciándose la secuencia de acciones de cada elemento implicado en la emergencia. Además de los propios de la Base Aérea de San Javier y de Aena, ha incluido otros externos como Delegación del Gobierno, Protección Civil de Murcia (112) de San Javier, Los Alcázares, Torrepacheco y San Pedro del Pinatar, Sanidad (061), Cruz Roja, Consorcio de Extinción de Incendios y Salvamento, Guardia Civil, Policía Nacional, Policía Local de San Javier, Institutos de Medicina Legal de Cartagena y Murcia, y Juzgado de San Javier.
El balance del accidente ha sido de cuatro supuestos muertos, 40 heridos graves y 30 leves o ilesos. Los figurantes (víctimas) han sido alumnos del Instituto de Enseñanza Secundaria Mar Menor y del Centro Integrado de Formación Profesional Hespérides convenientemente caracterizados por los propios alumnos de ese centro.
En el simulacro se han analizado los tiempos de reacción y respuesta de todos los colectivos (internos y externos) implicados. Se ha contado también con evaluadores de los diferentes organismos, por lo que las lecciones aprendidas serán empleadas para las oportunas modificaciones en los respectivos planes de emergencia, en el caso de que fueran necesarias.