El Aeropuerto de Madrid-Barajas acoge durante este verano 2012, principalmente entre los meses de junio y julio, la llegada de más de 1.500 niños que visitan nuestro país gracias a diferentes ONGs y asociaciones en lo que se conoce como «vacaciones de acogida o solidaridad».
Los niños, en su mayoría bielorrusos, ucranianos y saharauis, encuentran cada año en el Aeropuerto de Madrid-Barajas su punto de llegada a España, desde donde, en la mayoría de los casos, viajan a otras zonas de nuestro país para disfrutar de unas vacaciones estivales.
Las «vacaciones de acogida», como se conoce a estos programas de adopción temporal, permiten a las familias españolas acoger en sus hogares a niños extranjeros procedentes en su mayor parte de países con dificultades políticas y económicas, e incluso de campamentos de refugiados como los del Sáhara o de zonas asoladas por catástrofes como Chernobyl, permitiéndoles disfrutar de unas agradables vacaciones lejos de estos lugares de conflicto.
Hasta el momento han llegado ya a Madrid-Barajas alrededor de 900 niños, donde tanto el personal de Aena Aeropuertos, como de compañías aéreas y cuerpos y fuerzas de seguridad del estado prestan su apoyo para procurar que el paso de estos pequeños por las instalaciones se haga de manera sencilla, rápida y cómoda.
De hecho, desde finales de los años 80 y comienzos de los 90, cuando comenzaron a venir los primeros niños en acogida a nuestro país, el Aeropuerto de Madrid-Barajas colabora año tras año de forma activa con ONGs y asociaciones para procurar que el tránsito de estos niños por el Aeropuerto se desarrolle de la mejor forma posible.
Entre estas ONGs y asociaciones están AFAN, la Delegación Saharaui Comunidad de Madrid, las asociaciones Asnia, Azahar y Sanicher de niños bielorrusos o la Asociación Chernobyl Elkartea.