A finales del pasado 2016 concluyó la instalación de WiFi a bordo en toda la flota de larga de Airbus 330, una tarea ardua llevada a cabo por SR Technics en sus instalaciones en Zúrich. ¿Quieres saber cómo se instala Wifi en un avión? ¡Te contamos todo el proceso!
Para realizar la instalación de WiFi en una aeronave es necesario una numerosa cantidad de trabajos que precisan ser realizados en un centro de mantenimiento aprobado para tal efecto, empresas especializadas en MRO (Mantenimiento, reparaciones y operaciones). Este complejo trabajo de instalación completa del servicio de Wifi a bordo se realiza durante un periodo de entre 6 a 10 días.
Poner en marcha el servicio de WiFi a bordo requiere de la instalación de numerosos equipos. Hemos de tener en cuenta que tenemos que montar una completa infraestructura en el aire. Por ello contamos con:
1.- Panel de control del sistema.
2.- Antena satélite en la parte superior de la aeronave, que permita el enlace con los satélites y desde los satélites comunicarse con los sistemas de tierra y poder acceder a internet. La Antena de banda ancha, se sitúa en la parte superior del avión justo delante del estabilizador vertical, para reducir la resistencia aerodinámica.
3.- Servidor que controla y monitoriza la antena y su orientación y otro servidor que gestiona el portal de usuario y la información que en él se muestra. Estos sistemas se localizan en el compartimento de aviónica o electronic compartment, junto con el resto de equipos de aviónica.
4.- Una serie de dispositivos llamados WAP (Wireless Access Points) o transmisores wifi, que se instalan a lo largo de la cabina de la aeronave para dar cobertura wifi a los pasajeros. Los WAPs se distribuyen por la cabina dependiendo del largo de la aeronave, en nuestro caso para un A330 se instalan entre 5 y 6 WAP.
5.- Cell Modem para que la aeronave en tierra envíe datos de mantenimiento y monitorización del sistema.
6.- El apropiado cableado para enlazar todos los equipos anteriores que se sitúan en distintas localizaciones de la aeronave.
El proceso de instalación de WiFi a bordo requiere desmontar los porta equipajes y los paneles del techo de la cabina del avión y acceder a la estructura o fuselaje del avión para cablear la alimentación de la antena, así como poder anclarla en sus soportes a la estructura de la avión mediante los remaches y tornillería apropiada. También deben desmontarse los asientos de pasajeros de la zona donde se situará la antena para poder trabajar correctamente. Por otro lado, los WAP se instalan bajo los paneles de techo para que no sean visibles por los pasajeros, conectándose entre ellos, con los servidores y con la antena, formando la red wifi de cabina.
La instalación de la antena es el trabajo más delicado, el avión debe estar perfectamente en posición horizontal para poder agujerear su estructura, sujetar una estructura sobre la que se colocará la antena y justo encima un radome en forma de “joroba” que protege la misma. Antes de proceder a agujerear el fuselaje del avión, se mide y marca minuciosamente la posición en la que se taladrará la superficie con herramientas de alineamiento siguiendo la normativa estructural del fabricante de la aeronave o SRM (o Structural Repair Manual).
Al mismo tiempo que se prepara la colocación de la antena, en el compartimento electrónico de aviónica se rutean todos los cables que conectarán los elementos de cabina con los servidores que comprenden marañas de cables y cajas electrónicas. Es imprescindible seguir minuciosamente la documentación y las rutas de cableado ya que muchas veces hay que deshacer mazos de cables para poder añadir los nuevos, es decir desembridar y volver a embridar de nuevo los mismos. El cableado en una aeronave sigue una normativa muy estricta, hay que seguir la normativa que define el fabricante de la aeronave SWPM(Standard Wiring Practice Manual), en cuanto a tipología de cables, longitudes, espaciado, holgura, conectores..etc.
Antes de cerrar de nuevo los paneles de techo, colocar el radome y realizar las pruebas eléctricas se revisa por segunda vez toda la instalación de WiFi a bordo por los técnicos de mantenimiento, es lo que se llama una doble inspección, un método de contingencia para detectar cualquier anomalía. Finalmente se energiza el sistema y se realizan las pruebas funcionales del mismo, así como del resto de equipos de aviónica de la aeronave, para detectar que el nuevo sistema no interfiere sobre ningún otro.
Texto: www.billete996.aireuropa.com