El grupo aéreo IAG, propietario de British Airways e Iberia, anunció pérdidas netas de 3.806 millones de euros en el primer semestre por la caída del tráfico como consecuencia del coronavirus Covid-19. En el mismo periodo de 2019 ganó 806 millones de euros.
IAG explicó informó en un comunicado que quiere aumentar su capital en 2.750 millones de euros para reforzar sus finanzas, en plena crisis.
Por su parte, la facturación en el primer semestre se redujo a la mitad, hasta 5.300 millones de euros. La crisis sin precedentes llevó al grupo a una amplia reestructuración, con la anunciada supresión de 12.000 puestos de trabajo en British Airways.
IAG cree que habrá que esperar al menos hasta 2023 para que la demanda vuelva a los niveles de 2019. Ante este panorama, IAG informa que ha aplazado la entrega de 68 nuevas aeronaves prevista entre 2020 y 2022 y se han retirado anticipadamente algunos aviones con más años de servicio, incluyendo 32 Boeing 747 y 15 Airbus A340-600.
El grupo también quiere renegociar la compra prevista de la compañía española Air Europa, una operación que a finales de 2019 se anunció que costaría entorno mil millones de euros y que ahora Iberia quiere renegociar a la baja.
A causa de la necesidad de material sanitario, se operaron 1.875 vuelos de carga adicionales en el segundo trimestre para transportar equipos críticos y suministros esenciales.