Una décima de segundo separó al español Juan Velarde de su segundo podio de la temporada en el Red Bull Air Race World Championship. En su segunda carrera en la Challenger Cup, disputada el pasado fin de semana en la ciudad malaya de Putrajaya, el madrileño realizó una actuación sobresaliente sumando un meritorio cuarto puesto que mantiene intactas sus opciones de lograr un billete para la gran final mundial de China.
Nigel Lamb, ganador en Malasia
A pesar de competir con un avión totalmente diferente al que suele pilotar, Velarde no acusó su falta de rodaje y marcó un crono de 1’27”186, solo 105 centésimas más que el sueco Daniel Ryfa (1’27”081), segundo clasificado de la general por detrás del intratable François LeVot. El piloto francés, campeón mundial de vuelo acrobático, sumó su tercer triunfo en su penúltima comparecencia de la temporada regular, asegurando su presencia en la final del próximo mes de noviembre.
«Es el gran rival a bati», reconoció Velarde, «es un piloto de altísimo nivel, su estreno no ha podido ser mejor y nos pone a todos en una situación difícil. De hecho, si volamos cuatro carreras cada uno con opción a una quinta y él ya tiene 30 puntos, será francamente difícil recuperar esa diferencia. Pero se intentará».
Velarde aparca la competición en el quinto puesto de la general, empatado a diez puntos con el cuarto clasificado, el británico Tom Bennett. De esta forma, el campeón de España de vuelo acrobático disputará las dos últimas pruebas del campeonato en Texas y el circuito de velocidad de Las Vegas sabedor de los puntos que necesita para asegurarse su presencia en la gran final.
«Estar parado desde mayo hasta septiembre es un pequeño hándicap. Pero no puedo elegir. Voy a intentar entrenar todo lo que pueda con mi avión en unas condiciones diferentes a las que me encontraré en carrera. Es lo que hay y hay que aceptarlo como viene», aseguró antes de afrontar este pequeño punto y aparte que le obligará a seguir desde la distancia las dos próximas pruebas en Polonia y el hipódromo de Ascot.
Lamb se estrena en el calor de Malasia
Mientras, en la tercera prueba de la Master Class del Red Bull Air Race, el inglés Nigel Lamb superó al austriaco Hannes Arch en una batalla final electrizante. Con un calor sofocante, el británico logró contra todo pronóstico su primera victoria en el certamen, por delante del campeón del mundo en 2008 y del australiano Matt Hall.
El gran damnificado en esta primera prueba del campeonato disputada en Asia fue el bicampeón mundial Paul Bonhomme, que por primera vez en 16 pruebas se quedó fuera del podio. Su sorprendente quinto puesto en Putrajaya, unido a la segunda posición de Arch, deshizo el empate en lo más alto de la clasificación general, que pasa ahora a ser liderada por el austriaco con 30 puntos, por los 25 del británico. El gran triunfador del fin de semana, Nigel Lamb, se ha situado tercero, con 17.
Lamb, uno de los pilotos veteranos del campeonato y que, precisamente, es muy popular en Malasia por sus visitas pasadas como miembro de un equipo de acrobacias, dio toda una demostración de habilidad y precisión en un clima realmente caluroso y húmedo. Decidido a no dejarse superar por una temperatura que ha llegado al umbral de los 40 grados, Lamb mantuvo el temple en la final a cuatro parando el crono en un tiempo de 1’15”023, por el 1’15”597 de Arch y el 1’15”691 de Matt Hall.
«Jamás pensé que me sentiría así de emocionado», declaró un exultante Lamb, quien tras acabar en el podio seis veces en 44 pruebas y siete años de carrera en el Red Bull Air Race, por fin ha podido celebrar un triunfo. «Es un sentimiento increíble. Tras siete años y todo lo bueno y malo que me ha pasado, ésta es la merecida recompensa».