La empresa Daher, que fabrica el turbohélice TBM 900, ha presentado en el salón AirVenture, en Oshkosh (Wisconsin EEUU), que se celebra durante toda esta semana, su asociación con la firma Southern AeroMedical Institute (SAMI) para ofrecer un cursillo con el que afrontar una posible hipoxia, ante una hipotética despresurización de la cabina a elevada altitud.
Daher ha instalado un simulador del TBM 850 en el interior de una cámara hiperbárica de SAMI en Mebourne (Florida). El puesto de pilotaje cuenta con aviónica Garmin G1000 y está equipado con un sistema de máscaras de oxógeno de la marca Zodiac Aerospace.
La formación consiste en dos horas de formación teórica en las que se explican los sintomas y consecuencias de la aparición lenta de la hipoxia, muy difícil de detectar por el afectado. Después se realiza una sesión introductoria de una hora en simulador para pasar a otra hora de vuelo simulado a baja presión, finalizando con un breifing para aclarar dudas y fijar conceptos.
