Ayer se registró en el Congreso de los Diputados una Proposición No de Ley (PNL) presentada por el Grupo Parlamentario Socialista instando al Gobierno a adoptar una serie de medidas que reduzcan la siniestralidad provocada por las líneas de alta tensión en el ámbito de los Trabajos Aéreos, como operaciones de lucha contra incendios, salvamento o vuelos medicalizados.
La PNL, impulsada desde el Colegio Oficial de Pilotos de la Aviación Comercial (COPAC), solicita el uso de pinturas visibles para las torres de alta tensión, la señalización o balizamiento de los obstáculos de más de 30 metros de altura, así como de los cables de líneas eléctricas que crucen valles, estén situados en zonas de posible trabajo de mantenimiento forestal o extinción de incendios y en zonas de especial valor medioambiental, y que puedan poner en riesgo la seguridad en operaciones de trabajos aéreos.
Los diputados Miguel Ángel Heredia, Secretario General del Grupo Socialista, César Ramón, de la Comisión de Fomento, y Manuel González Ramos, de la Comisión de Medio Ambiente, registraron la PNL acompañados por el Decano del COPAC, Carlos Salas, y la Vocal, Laura Monclús.
Factor de riesgo
El COPAC espera que el resto de grupos parlamentarios apoyen la aplicación de estas medidas, que contribuirán a reducir la siniestralidad que afecta a los pilotos de trabajos aéreos.
Concretamente las operaciones de lucha contra incendios se desarrollan en escenarios de baja visibilidad, estrés, alta densidad de humo e intervienen numerosas aeronaves.
Estas circunstancias, unidas a la existencia de cables no balizados o de torres escondidas entre la masa forestal o pintadas de camuflaje resta eficacia y efectividad a las operaciones aéreas y, sobre todo, añade un factor de riesgo al ya de por si exigente trabajo del piloto, que le obligan a adoptar cautelas extraordinarias.
En nuestro país el impacto con cables ha provocado varios accidentes, la mayoría con consecuencias trágicas. El COPAC reconoce los avances en materia de seguridad que se han producido en el sector de Trabajos Aéreos, pero las cifras de siniestralidad siguen siendo inasumibles. Entre 2010 y 2015 se produjeron 58 accidentes e incidentes graves, con el resultado de 29 muertos y 25 heridos.