Durante el pasado año, el incremento de las tasas de aterrizaje, en más de un 400%, llegando en algunos casos al 2.500%, provocó una situación de grave riesgo para esta actividad aeronáutica. Aeroclubs, escuelas, empresas de trabajos aéreos, particulares y las empresas auxiliares del sector han sufrido un descenso importante de la actividad, llegando en algunos casos al cierre de varias empresas del sector.
Con la aparición por fin de la adaptación de las tarifas, sobre el valor de 2011, y la definición más adecuada de los vuelos de escuela y entrenamiento, hasta ahora solo aplicados a las grandes compañías, el grupo Pro-Aviación consigue cerrar una parte del ciclo negociador iniciado hace más de un año con la creación de una mesa de trabajo conjunta, hasta ahora inédita en la Aviación General.
Hay que añadir también la problemática derivada de las diferentes interpretaciones que de la normativa realiza la dirección de los diferentes aeropuertos de la red AENA, aplicando criterios arbitrarios tanto en la facturación de tasas y servicios como en los permisos para la actividad de las compañías de trabajos aéreos, suponiendo un grave problema para el desarrollo normal de la actividad.
El grupo Pro-Aviación lo componen actualmente las siguientes asociaciones y entidades: AECTA (Asociación Española de Compañias de Trabajos Aéreos), AEFA (Agrupación de Escuelas de Formación Aeronáutica), AEOAS (Asociación de Empresas y Operadores del Aeropuerto de Sabadell), AEPAL (Asociación Española de Pilotos de Aviación Ligera), AOPA SPAIN (Asociación de Pilotos y Propietarios de Aeronaves de España), AVE (Asociación de Volovelistas Españoles), RACE (Real Aeroclub de España) y FAM (Federación Aérea Madrileña).