Nueva vida para el biturbohélice Dornier Seastar en Canadá, que efectuó su primer vuelo en 1984. Primer hidroavión construido en materiales compuestos, sólo tres vieron la luz, pues el programa se detuvo en 1991. Ahora, el proyecto ha cogido nuevo impulso tras darse a conocer uno de los prototipos en Estados Unidos desde hace seis meses.
En la Convención NBAA de 2008 el Seastar ya estuvo en exposición estática y este año ha repetido. Además, en el último medio año ha efectuado una gira por América del Norte, en la que el constructor ha recogido suficientes intenciones de compra como para plantearse seriamente reiniciar la producción, proponiendo un hidroavión para 10 pasajeros, de ala alta y equipado con dos motores Prat & Whitney PT6-135A en línea.
Dornier afirma que ya cuenta con 25 pedidos y el pasado 19-10-09 anunció en su web www.dornierseaplane.com anunció que ha seleccionado dos lugares para ubicar la planta de ensamblaje: en Sant-Jean-sur-Richelieu, en Quebec, o bien en North Bay, en Ontario. La decisión final se tomará en el plazo de tres meses.
El lugar se considera idóneo, pues se han tenido en cuanta consejos de las autoridades y existe en ambas zonas industria aeronáutica, comenzando por la fábrica de Pratt & Whitney. Y, por supuesto, una zona y un país conformado por miles de lagos. Conviene recordar que el hidroavión ya cuenta con la certificación de la FAA estadounidense y la europea EASA.
Conrado Dornier, presidente de Dornier, dijo estar «muy contento porque continuaremos ampliando el legado centenario de la familia de aviones de Dornier en Canadá, país ideal para el mercado de nuestro hidroavión».
Dos años para las primeras entregas
Joe Walker, director ejecutivo de Dornier, explicó que «al ritmo actual, la compañía está creciendo rápidamente. Además de finalizar la selección del sitio, la compañía está en discusiones detalladas con nuestros principales proveedores. El proceso de selección de proveedores se completará en los próximos 12 meses, y las entregas comenzarán en 24 meses». Es decir, a finales de 2012 o principios de 2013.
Además, subrayó que «estamos satisfechos por la profundidad y la amplitud de interés del mercado por el Dornier Seastar. Se han recibido consultas de más de 132 países. En todo el mundo el mercado demanda este aparato, que ya ha generado más de 25 cartas de Intención que actualmente estamos convirtiendo en contratos en firme».
El hidroavión Dornier es propiedad de la familia de Conrado Dornier, que atesora el legado de una tradición familiar de tres generaciones en el diseño innovador, el desarrollo y fabricación de aviones y barcos voladores. El Seastar será el primer hidroavión fabricado con matriales compuestos. Lo diseñó Claudius Dornier Jr, quien durante muchos años fue presidente del grupo de empresas Dornier.
Los primeros 10 ejemplares se producirán de acuerdo con el diseño original y los siguientes incorporarán aviónica moderna, unsistema antihielo, piloto automático y aire acondicionado, según explica el periodista Gil Roy en su blog, www.gilroy.fr. La previsión del fabricante es que Seatar se nutra de pedidos procedentes de propietarios privados, empresas comerciales, agencias gubernamentales y ONGs. El precio del hidroavión rondará los 6 millones de dólares.
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La visión del impulsor del proyectos es la de reiniciar la aviación anfibia con un diseño moderno que supere el problema de la corrosión. Claudius Dornier Jr. fue el hijo mayor del pionero de la aviación Claude Dornier, que en el año 1900, comenzó a trabajar con el conde Zeppelin y que fundó Dornier. Desde entonces la saga de los Dornier, produjeron más de 100 diseños, tanto para los mercados civiles y militares, y fabricaron más de 10.000 aeronaves, de las cuales más de 1.000 eran hidroaviones.