Un Boeing 737 de la compañía Transavia impactó la noche del pasado viernes día 11 sobre las 22 horas contra una bandada de gaviotas cuando se disponía a aterrizar en el aeropuerto de Girona – Costa Brava procedente de Amsterdam.
La parte delantera del avión quedó dañada y con restos de sangre de las aves. Incluso un ave quedó adherida en el parabrisas del aparato, según se aprecia en la fotografía que nos ha facilitado Albert Frigolé.
La imagen la captó ayer sábado por la mañana y, también, otra de los trabajos de limpieza de la pista que realizaron los bomberos del aeropuerto, aunque también se limpió después del suceso, según informó la oficina de prensa de Aena.