Los pasajeros de un avión de Ryanair que llevaban varias horas dentro del avión sin poder iniciar el vuelo entre Glasgow y Dublin el pasado día 16 oyeron atónitos como una de las azafatas les explicaba que «el capitán no puede despegar cuando tenemos hielo en las alas. No queremos morir», comentario que suscitó sorpresa, abucheos y más nerviosismo entre los pasajeros.