La fotografía que tiene ante sus ojos fue tomada en el planeta Marte por el rover Curiosity, que se posó allí el 6 de agosto de 2012, y ha recorrido más de 78 millones de kilómetros antes de llegar a su pantalla.
Entre otras cosas muestra en el centro de la imagen, sobre el rover, la antena hexagonal fabricada por Astrium –la primera empresa europea de la industria astronáutica– que envía a la Tierra los datos científicos recogidos por el robot.
Se trata de una antena de gran sensibilidad, denominada HGA («Antena de Elevada Ganancia») y utilizada para transmitir directamente los datos científicos e informaciones sobre el estado del rover marciano desde Marte a la Tierra, sin que su señal se vea repetida por satélite alguno. De esta manera el rover también puede recibir, desde la Tierra, las instrucciones necesarias para el desarrollo de su misión.
Fabricada por Astrium en su centro de Barajas, en España, con el apoyo del Centro para el Desarrollo Tecnológico e Industrial (CDTI), la antena, orientable es capaz de concentrar la energía en la dirección escogida. Gracias a esta tecnología desarrollada por Astrium, el rover ya no tiene necesidad de reorientarse para hablar con la Tierra y ahorra así su energía.