El pasado 27 de diciembre se presentó a los medios de comunicación en la nave de ensamblaje del Jet Propulsion Laboratory (JPL), en Pasadena, California (EE.UU.) el nuevo rover Mars 2020, cuyo lanzamiento está previsto para el próximo verano.
La sala limpia, también conocida como High Bay 1 de la Instalación de Ensamblaje de la Nave Espacial, es donde se construyeron los cuatro rovers de Marte de la NASA: el Sojourner del tamaño de un horno de microondas, que aterrizó en 1997; el Spirit and Opportunity de Mars Exploration Rovers, del tamaño de un carrito de golf, que aterrizó en 2004; y el rover Curiosity, del tamaño de un Mini Cooper, que ha estado explorando la región de Mount Sharp del Planeta Rojo desde 2012.
Programado para lanzarse en julio o agosto de 2020, el rover Mars 2020 aterrizará en el cráter Jezero el 18 de febrero de 2021. Allí buscará signos de vida microbiana pasada, caracterizará el clima y la geología de Marte, recolectará muestras para traerlas en el futuro regreso a la Tierra y allanar el camino para la exploración humana del planeta rojo.
Tanto para asegurarse de que la menor cantidad posible de microbios terrestres enganche un viaje a Marte como para evitar que entren partículas que puedan interferir con las operaciones del rover, High Bay 1 viene con estrictos estándares de limpieza: cualquiera que ingrese a la sala limpia, ya sea un técnico o un periodista, debe usar una bata especial, botines, un gorro para el cabello, una mascarilla y guantes de látex.
En las próximas semanas, los ingenieros y técnicos empacarán el rover Mars 2020 en un contenedor especialmente diseñado. Una vez que llegue hacia el mes de febrero a Cabo Cañaveral, Mars 2020 se someterá a un procesamiento y pruebas finales antes del lanzamiento.
El JPL construyó y gestionará las operaciones del rover Mars 2020 para la NASA. El Programa de Servicios de Lanzamiento de la NASA, basado en el Centro Espacial Kennedy de la agencia en Florida, es responsable de la gestión del lanzamiento.
Mars 2020 es parte de un programa más amplio que incluye misiones a la Luna como una forma de prepararse para la exploración humana del Planeta Rojo. Proyectado el regreso de los astronautas a la Luna para 2024, la NASA proyecta establecer una presencia humana sostenida en la Luna para 2028 a través de los planes de exploración lunar Artemis de la NASA.
