La compañía Spanair realizó ayer el vuelo inaugural de su nueva ruta Barcelona – Belgrado, capital de Serbia, después de que durante 18 años no hayan existido vuelos directos entre ambas capitales. El vuelo lo efectuó el Airbus A320 (EC-IPI) de la compañía.
Spanair ofrece tres vuelos de ida y vuelta a la semana, los lunes, jueves y sábados, en un intento por abrir nuevos mercados.
En 2009, sólo 35.000 personas volaron entre ambas ciudades, utilizando un tercer aeropuerto para llegar a destino. Una cifra baja, que no será difícil superar pues Serbia camina hacia su integración en la Unión Europea. Precisamente, los vuelos a la antigua capital de Yugoeslavia se suspendieron en 1998, al imponerse al país sanciones europeas por su política belicosa en los Balcanes bajo el mandato de Milosevic.
La compañía dio un especial realce a esta nueva ruta, motivo por el cual el presidente de Spanair, Ferran Soriano, encabezó la delegación de la empresa, a la que se unió el expresidente de la Generalitat Pasqual Maragall. Asimismo, más de 30 periodistas realizaron el vuelo de ida y vuelta, para cubrir el evento. Durante los trayectos de ida y vuelta, los pasajeros fueron agasajados con un copa de cava. El vuelo de ida duró 2 horas y 5 minutos, y el de vuelta 2 horas y 25 minutos, al tener viento en contra.
En Belgrado, Spanair ofreció una rueda de prensa en el hotel Hyatt Regency, a la que acudieron los medios locales, cargos institucionales de Serbia, representantes de los organismo de turismo, y el embajador de España, Iñigo de Palacio. Ferran Soriano explicó las líneas básicas del proceso de reestructuración de la compañía para hacerla competitiva, su aspiración de convertir Barcelona en un hub de la aerolínea y de Star Alliance, a fin de iniciar vuelos transoceánicos a América en los próximos años. Spanair abrirá en los próximos días nuevas rutas a Tel Aviv, Estambul, Malta, Dubrovnik y Edimburgo.
Posteriormente, los directivos de Spanair y los periodistas realizaron una visita guiada por una de las calles peatonales más céntricas de Belgrado, contemplaron algunos edificios históricos, y recorrieron la fortaleza militar, enclavada en un gran parque público, una parte del cual ofrece una preciosa vista panorámica sobre el Danubio y el río Sava, que desemboca en la zona. Belgrado tiene aproximadamente medio millón de habiyantes y en su área de conurbación viven 1,6 millones de personas. / Texto, edición y fotos: José Fernández
