ITP anunciado ayer su participación como socio a riesgo y beneficio en los motores PurePower PW800 de Pratt & Whitney Canadá. Se trata de los motores que equiparán los nuevos aviones de negocios Gulfstream G500 y G600, que fueron presentados el pasado martes en la sede de Gulfstream en Georgia, EEUU.
Con una potencia de 16.000 libras, el motor PurePower PW800 está concebido para aviones de negocios de largo alcance, rápidos y que vuelan a mayor altura. Contarán con la misma tecnología ya testada de la familia de motores Pratt & Whitney PurePower GTF (geared turbo fan) para aviones comerciales.
Asimismo, está previsto que la certificación de los motores PurePower PW814GA y PW815GA para el Gulfstream G500 y G600 respectivamente se obtengan antes de final de año. Así, se prevé que cuando el motor PW800 entre en servicio, la familia de motores PurePower habrá acumulado más de 1,5 millones de horas de vuelo.
Como socio del motor PW800, ITP es responsable del diseño, desarrollo, fabricación y montaje de tanto el Compresor de Baja Presión como de la Estructura Inter-Turbinas del motor para toda la vida del programa. ITP participará también en el mantenimiento, reparación y overhaul del PW800 una vez entre en servicio.
El Compresor de Baja Presión canaliza el aire de la salida del fan hacia el núcleo, comprimiendo el aire y derivándolo hacia el Compresor de Alta Presión. Está compuesto por múltiples etapas del estator y rotores de titanio con los álabes integrados (IBRs).
La Estructura Inter-Turbinas es una estructura compleja, capaz de soportar altas temperaturas, situada entre la turbina de alta presión y la turbina de baja presión, que tiene la función de proporcionar integridad estructural al motor, así como albergar algunos de los rodamientos principales del motor.
Tanto el Compresor de Baja Presión como la Estructura Inter-Turbinas son productos clave dentro de la estrategia ITP y para los que ITP cuenta con la última tecnología y capacidades de producción. El diseño y producción de los distintos componentes clave para estos módulos se llevará a cabo en las diferentes instalaciones de ITP en España (Zamudio y Ajalvir), México y el Reino Unido.
Se estima que una vez que el motor entre en servicio, su producción se prolongará a lo largo de dos décadas y generará ingresos para ITP de más de 500 millones de euros.