Boeing ha remitido un informe al regulador de la actividad bursátil de los Estados Unidos, organismo conocido por las siglas SEC, en el que insinúa que el programa del ‘jumbo’ 747 está prácticamente agotado y en puertas de su cancelación. Las primeras entregas se efectuaron en 1969.
El aviso de la posible cancelación del programa se formula en condicional: «Si no somos capaces de conseguir suficientes pedidos y/o reducir la exposición a los riesgos relacionados con el mercado y la producción, podríamos acusar pérdidas adicionales, que podrían ser sustanciales, y es razonablemente posible que decidamos parar la producción 747», se indica en el informe.
Porque resulta que para Boeing es casi una misión imposible ampliar el número de pedidos de que tiene en cartera. El primer semestre de este año solo ha entregado tres aviones 747 cargueros, tres menos que en el mismo periodo de 2015.
Boeing solo tiene unos 20 aviones pendientes de producir, de los que buena parte son cargueros. En marzo de 2015 Silk Way West, de Azerbayán, encargó tres cargueros del modelo 747-8 y este año AirBridgeCargo ha encargado cuatro más.
El fabricante americano también ha recibido el encargo de fabricar dos Air Force One, versión 747-8, que se deben entregar en 2024 y que relevarán a los que ahora están servicio. Estos aviones están en la actualidad en fase de diseño.
Boeing intentó estirar el éxito del 747, del que ha vendido más de 1.500 ejemplares, con la versión 747-8. El avión se certificó en diciembre de 2011 y se postulaba como competidor del A380 que, precisamente, también está en crisis a la vista de que en los últimos años no consigue ampliar su cartera de pedidos.
El 747 ha perdido su posición ventajosa entre los aviones de pasajeros de larga distancia, sobre todo porque al ser un avión con cuatro motores tiene un consumo excesivo de combustible y es menos flexible que los birreactores actuales, más eficientes y con menor capacidad de pasajeros. Recientemente, Air France retiró del servicio el último ‘jumbo’ que tenía operativo.
Hasta ahora Boeing ha venido fabricando 12 ejemplares al año pero a partir de septiembre reducirá el ritmo de producción a solo seis aparatos.
