Boeing informa que las investigaciones realizadas las últimas semanas han conducido a la certeza de que los recientes accidentes del vuelo 610 de Lion Air y del vuelo 302 de Ethiopian Airlines estuvieron provocados por una cadena de sucesos con un eslabón común: la activación por error del sistema MCAS del avión.
En un comunicado afirma que la empresa tiene la responsabilidad de eliminar ese riesgo, y sabe cómo proceder. Como parte de este esfuerzo, se trabaja en la actualización del software del 737 MAX, que evitará que vuelvan a ocurrir accidentes similares. Los equipos trabajan sin descanso, modifican y prueban el software, realizan revisiones imparciales y dialogan con los reguladores y clientes de todo el mundo en el proceso de la certificación final.
El CEO de Boeing, Dennis Muilenburg, explica que «recientemente tuve la oportunidad de experimentar de primera mano el funcionamiento de la actualización del software de forma segura en un vuelo de demostración del avión 737 MAX 7. También estamos finalizando nuevos cursos de formación para pilotos y material de consulta adicional para nuestros clientes del MAX de todo el mundo. Este progreso es el resultado de nuestro enfoque integral y disciplinado y de nuestra política de dedicar el tiempo necesario para que el resultado sea satisfactorio».
Mientras se trabaja en la modificación del software, la empresa ha decidido reducir la producción del 737, pasa adaptarse a la inevitable pausa en las entregas. De esta forma se ha dicidido producir a mes 42 aviones 737 MAX al mes en vez de los 52 que se fabricaban antes de la crisis.
Con un ritmo de producción de 42 aviones al mes, el programa 737 y los equipos de fabricación pertinentes mantendrán sus niveles de empleo actuales.
El CEO de Boeing subraya que «estamos coordinándonos con nuestros clientes a medida que trazamos planes para mitigar el impacto de este ajuste. También colaboraremos directamente con nuestros proveedores en sus planes de producción para minimizar el trastorno en sus actividades y el impacto financiero del cambio del ritmo de producción».
«En vista de nuestro compromiso con la mejora continua y nuestra determinación de hacer cada vez más seguro un sector que ya de por sí lo es, he pedido al Consejo de Administración de Boeing la creación de un comité para revisar todas las políticas y procesos que tiene la compañía para el diseño y el desarrollo de los aviones que fabricamos. El comité confirmará la efectividad de nuestras políticas y procesos para garantizar el más alto nivel de seguridad del programa 737 MAX, y de los demás programas, y recomendará mejoras para nuestras políticas y procesos».