El fabricante suizo Pilatus logró mantuvo el tipo en 2020, a pesar del impacto de la pandemia de Covid-19. El año pasado alcanzó una facturación entorno a los 1.100 millones de francos suizos, unos mil millones de euros, cifra algo inferior a la de 2019. El fabricante entregó 129 aviones. El valor de los pedidos pendientes de servir asciende a 1.547 millones de euros.
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El desglose de las entregas es el siguiente: 41 jets PC-24, 82 turbohélices PC-12 NGX y seis aviones de entrenamiento militar PC-21. El fabricante considera que tanto el PC-12 como el PC-24, «nuestros últimos productos estrella, se están vendiendo muy bien». El PC-24 número 100 fue entregado al Jetfly a fines de 2020, lo que marca un hito importante en este programa aún joven.
Con el pedido para suministrar al Ejército del Aire de España 24 PC-21, firmado a finales de enero de 2020, Pilatus logró un objetivo muy importante para asegurar el futuro. Ya ha tenido lugar el vuelo inaugural del primer PC-21 del Ejército del Aire español.
Bonificación para empleados a pesar de la pandemia
El excelente resultado de fin de año se debe en particular al recurso más importante de la empresa: su plantilla, que recibirá un pago adicional equivalente al salario de un mes y medio. Pilatus siempre ha pagado a sus empleados una bonificación desde que se lanzó el plan de participación en las ganancias de los empleados en 1995, lo que les permite participar directamente en el éxito de la empresa.
