Boeing, Embraer y la Fundación Estatal de Sao Paulo para la Investigación (FAPESP) anunciaron el 26 de octubre un plan para colaborar en un programa de I+D a largo plazo en el campo de los biocombustibles para la aviación; el plan representa un avance significativo hacia la creación de una industria sostenible de biocombustibles para el sector aéreo en Brasil. Las líneas aéreas Azul, GOL, TAM y Trip actuarán como asesores estratégicos del programa.
Tras el acuerdo firmado hoy, Boeing, Embraer y FAPESP lideran la preparación de un informe detallado en el que se desglosen las oportunidades y retos singulares en la creación de una industria rentable y sostenible para la producción y distribución de combustible para aviación de origen biológico en Brasil. El informe, que incluirá una hoja de ruta de la tecnología y la sostenibilidad, se hará público cuando se termine, en 2012.
Una serie de sesiones públicas se celebrarán a lo largo de 2012 para servir de guía al plan, con aportaciones de una gran variedad de partes interesadas, además del comité de asesores estratégicos; el resultado será unas directrices amplias y un gran nivel de apoyo institucional para el proyecto. Entre los participantes se incluirán líneas aéreas, productores y suministradores de combustibles, expertos en temas medioambientales, grupos de ciudadanos y entidades oficiales.
El estudio permitirá encuadrar la creación en Brasil de un centro de investigación de los biocombustibles sostenibles para la aviación. El centro será financiado conjuntamente por la FAPESP y el sector con el fin de impulsar un plan de investigación a largo plazo para el desarrollo tecnológico relacionado con los biocombustibles para la aviación en Brasil. Está previsto que FAPESP lance una solicitud de propuestas para el establecimiento de este centro una vez termine la fase de estudio inicial. La misión del centro será superar las lagunas en los aspectos técnicos, comerciales y de sostenibilidad para poder crear esta nueva cadena de suministro de combustible para aviación en Brasil.
Boeing y Embraer buscan producir biocombustibles sostenibles para la aviación derivados de recursos renovables que no compitan por terrenos o agua con el cultivo de alimentos en regiones vulnerables. Ambas empresas están combinando intereses agrarios, investigadores académicos, expertos en asuntos medioambientales, y empresas de refinería y aeroespaciales de todo el mundo con el fin de establecer la infraestructura local necesaria para desarrollar una industria de biocombustibles que sea sostenible a la vez que viable en términos económicos.
En 2008, FAPESP anunció un programa amplio de investigación en bioenergía (BIOEN) a través del cual la fundación financia a 300 científicos en los campos de biomasa y producción de biocombustibles en Brasil y otros 11 países, además de estudiantes e investigadores post-doctorales.
Los ensayos de vuelo realizados por las líneas aéreas civiles y las ejércitos del aire desde 2008 demuestran que los biocombustibles tienen un rendimiento parecido— cuando no superior—al queroseno convencional para aviones.
