El avión estará propulsado por cuatro motores alimentados por energía solar. Durante el ejercicio se evaluó la capacidad de un piloto para habituarse a un vuelo de larga duración y mejorar la ergonoia del asiento y la cabina de pilotaje.
Durante esta misión se analizó la alimentación, el aseo, el ejercicio y la capacidad de la reacción del piloto, evaluando su nivel de atención, así como la capacidad para pilotar el avión combinano periodos de sueño de corta duración.
Si bien el prototito del Solar Impulse HB-SIB está en construcción, el Solar Impulse N º 1 (HB-SIA) se seguirá utilizando este año en nuevos vuelos. Como ya ocurrió en 2011, lo pilotarán por separado Bertrand Piccard y André Borschberg. Para este año se prevén vuelos sobre el mar Mediterráneo, aumentando de forma paulatina las distancias y los tiempos de vuelo.
Más información en el blog de Solar Impulse, donde se puede visionar un vídeo.