La reunión celebrada hoy en el Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA) entre los sindicatos de los trabajadores de Iberia y los representantes de la empresa ha acabado sin acuerdo. En consecuencia, los sindicatos han convocado 15 días de huelga, que se harán en tres grupos de cinco días cada uno. La huelga comenzará el 18 febrero y se prolongará el día 22. Si no se llega a un acuerdo, los paros volverán a reproducirse del 4 al 8 de marzo y del 18 al 22 de marzo.
La huelga, a la que por ahora no se ha sumado el sindicato de pilotos SEPLA, se ha convocado para protestar por el expediente de regulación de empleo anunciado por Iberia el pasado mes de noviembre, cuando informó que suprimirá 4.500 empleos y que procederá a drásticos recortes salariales.
Los sindicatos de los trabajadores de tierra alcanzaron un acuerdo el pasado 17 de diciembre y pareció que se esfumaba la posibilidad de huelga. A este acuerdo se sumó con posterioridad el Sepla.
Comenzó un periodo de negociación que terminó el pasado 31 de enero sin acuerdo. Iberia formuló entonces una nueva oferta, que los sindicatos han desestimado. El motivo del rechazo se ha debido a que los sindicatos consideran que el plan de Iberia no es creible dado que la aerolínea no renuncia a alcanzar la rentabilidad en pocos años. En concreto, pretende mejorar los resultados operativos en 600 millones hasta 2015. En los primeros nueve meses del año, las pérdidas de la aerolínea han sido de 262 millones.
Ante la falta de acuerdo, Iberia decidió seguir adelante con el duro ajuste anunciado en noviembre pasado para salir de las pérdidas, según decidió el Consejo de Administración de IAG, el holding que agrupa a la aerolínea española y British Airways desde su fusión en 2011, en una reunión el 1 de febrero.