Arranca este lunes la mayor huelga de la historia de la aerolínea española Iberia. Según la compañía se están cumpliendo los servicios mínimos previstos y el paro se desarrolla sin incidentes, con «la relativa normalidad» de una huelga.
Unos 20.000 trabajadores de los colectivos de personal de tierra y tripulación de cabina inician una huelga de 15 días, cuyos primeros cinco días de paros continuados comienzan este lunes. La huelga está convocada para protestar contra la reducción de 3.807 empleos y el recorte de los salarios de la aerolínea. Las siguientes jornadas de paros se realizarán desde el 4 hasta el 8 de marzo y del 18 al 22 de marzo.
La huelga ha obligado a la compañía a cancelar 415 vuelos, el 40% de sus operaciones, entre el 18 y el 22 de febrero. En este primer día se han anulado 236 vuelos y 1.200 se cancelarán en varias aerolíneas en los 15 días de paros. Algunas de las 120 compañías a las que Iberia presta servicios de asistencia en tierra se verán también afectadas, aunque las más perjudicadas son las de su propio grupo: Iberia Express, Vueling y Air Nostrum.
También se ven alteradas las programaciones de compañías extranjeras, como por ejemplo, la alemana Lufthansa, que ha informado a sus clientes de que la huelga puede dar lugar a irregularidades. Esto le ha ocurrido, por ejemplo, a un pasajero en Barcelona que ha explicado a Europa Press que tenía que viajar a Chicago con escala a Londres con la compañía British Airways y que desconocía que los vuelos de esta aerolínea también podían quedar afectados por la huelga.
Los pasajeros afectados buscan una solución
A medianoche, los puntos de facturación de equipajes de Iberia en el aeropuerto madrileño de Barajas estaban vacíos y algunos pasajeros se presentaban en los mostradores de atención al cliente para tratar de cambiar sus vuelos
«Yo había elegido un vuelo de Iberia y, luego, iba a hacer una conexión, pero mi vuelo ha salido, así que estoy a punto de tomar otro, también con Iberia. Pero para llegar a mi destino, tendré que tomar un vuelo de conexión diferente», ha comentado el pasajero Miguel Corral, quien viajaba de Madrid a Río de Janeiro, según Reuters Televisión.
Mientras, en Barcelona, decenas de pasajeros afectados por las cancelaciones hacen cola en los mostradores de facturación de diferentes compañías en el Aeropuerto de El Prat. En los de Vueling, la compañía más afectada por la huelga en este aeródromo, algunos pasajeros han criticado que ha habido vuelos anulados sin previo aviso y sin que constaran en la lista de cancelaciones que esta última compañía había hecho pública el pasado fin de semana en su página web.
Es el caso de un pasajero que tenía que volar a Madrid y que ha explicado a Europa Press que su agencia de viajes «había confirmado que el vuelo no estaba afectado» y que no había recibido ninguna comunicación de la cancelación. Otro pasajero con destino a Sevilla ha relatado que compró los billetes el jueves «sin que dieran ningún tipo de aviso cuando la huelga ya estaba convocada, y este fin de semana en la web de Vueling no había ninguna advertencia sobre el vuelo».
La huelga era «inevitable»
«Los trabajadores no tienen otra opción que tomar esta medida radical para la defensa de nuestros puestos de trabajo. Ellos están poniendo sobre la mesa un plan que, por primera vez en la historia de Iberia, reducirá un 20% los empleos de la empresa», ha señalado Eduardo García, un trabajador de Iberia y miembro del sindicato español Comisiones Obreras (CC.OO), que ha comentado que la huelga era inevitable.
Este sindicato ha convocado los paros junto a los sindicatos de los trabajadores de tierra y de los tripulantes de cabina de pasajeros (TCP), UGT, USO, Asetma, Sitcpla y CTA-Vuelo, que representan al 93% de la plantilla.
La primera jornada de huelga irá acompañada de protestas, que han comenzado a las 8 de la mañana, con una marcha de ocho kilómetros entre la nueva y la antigua zona industrial de Barajas, y continuarán con una concentración entre las 12 y las 15 horas en la terminal T-4 del Aeropuerto Madrid-Barajas.
Mientras, en El Prat, una cincuentena de trabajadores de Iberia se han manifestado a primera hora del lunes en la terminal T1 con pitos y sirenas para protestar contra el expediente de regulación presentado por la empresa, una movilización que discurre en medio de un fuerte dispositivo policial que vigila a los trabajadores así como los accesos a la instalación.
Analistas de bolsa del Banco Sabadell estiman que esta huelga de 15 días de duración podría costar a la empresa entre 50 y 100 millones de euros.
International Airlines Group, nacida de la fusión entre Iberia y British Airways, ha negociado con los trabajadores durante meses una reestructuración de la aerolínea española, que registró una pérdida operativa de 262 millones de euros en los primeros nueve meses de 2012.