No es la primera vez que la Comisión Europea propone un Cielo Único Europeo. Tras los fracasos de los últimos años, el ejecutivo comunitario, ante el aumento del tráfico aéreo, vuelve con nuevas medidas. El objetivo es reducir la distancia media de vuelo, las emisiones contaminantes, y el coste. Esto ha llevado a los controladores aéreos franceses a iniciar una huelga de tres días. Este miércoles se unirán otros once países.
Ayer la huelga comportó que se anulasen en Francia unos 1.800 vuelos domésticos e internacionales. En el aeropuerto de Roissy se suspendieron el 75% de vuelos y en los de Orly, Beauvais, Toulouse, Burdeos, Lyon, Niza y Marsella aproximadamente el 50%.
Philippe Biol, del sindicato SNCTA, el principal del sector, acusa a la Comisión de velar sólo por intereses económicos. «Si se están movilizando los controladores aéreos es principalmente por el hecho de que la Comisión Europea ha entrado en una lógica de reducir costes».
Según fuentes comunitarias, su intención es unificar 27 sistemas diferentes, y miran a EEUU, donde gestionan el doble de tráfico aéreo con la mitad de gasto. Ningún Estado Miembro cumple con la legislación europea, existente desde 2004.
El Comisario europeo de Transporte, Siim Kallas, advertió el pasado martes martes en Estrasburgo de la necesidad de actuar. «Si dejamos las cosas como están, nos enfrentaremos a una saturación, al caos en nuestro espacio aéreo. En tierra, los aeropuertos estarán tan masificados que habrá dos millones de vuelos incapaces de despegar o aterrizar».
En España Aena se encarga de controlar el espacio aéreo a través de cinco centros de control. Su gestión ha pasado de ser la más cara de la Unión Europea a ocupar un sexto lugar en los últimos tres años.