CCOO denuncia que la compañía aérea Air Nostrum es la única que opera en suelo español que a día de hoy prohíbe a sus azafatas de tierra y de cabina el uso de pantalones. El sindicato considera esta decisión antidemocrática pues contraviene la voluntad mayoritaria de la plantilla, expresada reiteradamente desde 2007 por sus representantes sindicales y plasmada en las más de 500 firmas recogidas. CCOO ha instado a la Inspección de Trabajo a que determine las posibles infracciones con relación a la protección del derecho a la intimidad y la propia imagen de las trabajadoras, así como a la prevención de riesgos para la salud.
La competencia sobre la uniformidad de los trabajadores y trabajadoras corresponde a la empresa, que no ha cambiado sus criterios desde el año 2000. Entonces decidió que las mujeres que trabajaran en ella debían llevar siempre una falda, que si bien hace 11 años debía ir «por debajo del hueso de la rodilla» ahora, tras la actualización se ha recortado «cinco centímetros por encima de la rodilla».
Discriminación sexista
Para CCOO esta imposición es una clara manifestación de discriminación sexista en línea con la que se ejerce contra los hombres, a los que no se admite para desempeñar la profesión de tripulante de cabina. Es una utilización machista de las mujeres cuya imagen sólo es aceptable para la empresa si enseñan las piernas, requisito que no tiene nada que ver con el desempeño de su puesto de trabajo. La presión para que lleven falda por un criterio puramente estético obvia otras consideraciones como la funcionalidad o la salud, que deberían ser los prioritarios.