Royal Air Maroc (RAM) tiene ya muy avanzado el plan de reducción de plantilla y de racionalización de los recursos humanos que había anunciado el pasado mes de agosto. De los 1.560 despidos previstos, 1.087 empleados se han acogido a las bajas incentivadas y de estos 790 despidos ya se han realizado, según informó el diario «Le Matin du Sahara», que recogió declaraciones del director general de la compañía Driss Benhima.
«Gracias a la toma de conciencia del personal y de los representantes sindicales acerca de la grave situación y, sobre todo de las contrapartidas, indemnizaciones y medidas de acompañamiento para aquellos que nos dejan, el plan se desarrolla en buenas condiciones», dijo Benhima. Los despidos se acordaron al comprobar los directivos de RAM que la compañía perdía cada semana entorno a dos millones de euros, a causa de la supresión de vuelos derivados de los disturbios producidos en algunos países árabes a la raíz de las protestas para democratizar los regímenes políticos. También, RAM se ha visto afectada por la competencia de las compañías de bajo coste Air Arabia, Jet4you, EasyJet y Ryanair.
En el marco del reducción de la actividad RAM debe desprenderse de 10 aviones y de reducir su oferta de plazas un 20%. En contrapartida, el Estado inyectó a finales de septiembre 145 millones de euros.
