Los 30 primeros componentes del Ejército de Aire a bordo del avión T-10 (C-130 Hércules) que España ha desplegado en la denominada ‘Operación Marfil’, a fin de colaborar en el transporte de tropas y material de la Misión Internacional de Apoyo a Malí con Liderazgo Africano (AFISMA), llegaron a las 16,10 horas del pasado sábado al aeropuerto de Dakar (Senegal).
La misión fue recibida por la embajadora de España en Senegal, Cristina Díaz Fernández-Gil.
El Hércules, del Ala 31, había partido sobre las 7,15 horas desde su base en Zaragoza. Tras una escala técnica para incorporar personal y equipo adicional en la base aérea de Morón, Sevilla, sobrevoló el mar hasta Canarias para continuar luego bordeando la costa de Mauritania y Senegal hasta Dakar.
Puente aéreo Dakar – Bamako
La misión española tendrá su base de despliegue en las instalaciones aéreas francesas en el aeropuerto internacional de esta ciudad. Desde la capital senegalesa, el avión T-10 mantendrá un puente aéreo con Bamako, capital de Malí, para el transporte de tropas y material de la AFISMA. El avión del Ejército del Aire no hará vuelos ‘intrateatro’, es decir, entre aeropuertos dentro del propio territorio malí
El avión desplazado ha transportado el personal y equipo inicial básicos para el establecimiento del contingente español en Dakar. Se espera que a mediados de esta semana pueda completarse el destacamento español, con 20 militares más hasta completar la cifra de 50 personas desplegadas, y la totalidad del material necesario para su despliegue autosuficiente.
Entre los 30 militares que salieron el pasado sábado de Zaragoza, al mando de un comandante jefe de misión, figuran dos tripulaciones completas de Hércules, formadas por un piloto, un copiloto, un navegante, un mecánico de vuelo y dos supervisores de carga cada una y todos ellos pertenecientes al Ala 31.
Igualmente han viajado a Dakar un jefe y dos equipos operativos del Escuadrón de Apoyo al Despliegue Aéreo (EADA), encargados de la seguridad del contingente español.
También forma parte del contingente una Unidad Médica Aérea de Apoyo al Despliegue (UMAAD) al completo, con capacidad y medios para el establecimiento de un hospital tipo Role-1.
Durante su escala en la base aérea de Morón, se incorporó un equipo del Grupo Móvil de Control Aéreo (GRUMOCA), con base en Tablada (Sevilla), que se encargará de establecer las comunicaciones seguras del contingente con España.
