Los féretros de las víctimas españolas del accidente del avión de la compañía Germanwings llegaron ayer en un vuelo especial al aeropuerto de Barcelona-El Prat, el mismo del que salió la aeronave siniestrada antes de estrellarse en los Alpes franceses el pasado 24 de marzo.
Según confirmaron fuentes de la compañía Lufthansa, matriz de Germanwings, hoy fueron repatriados desde Marsella, en Francia, los restos de 32 fallecidos, que serán entregados a sus familiares entre hoy y mañana.
La vicepresidenta del gobierno español, Soraya Sáenz de Santamaría, viajó hasta Barcelona para recibir los féretros. Los medios de comunicación no pudieron acceder a la zona del aeródromo donde esperaban los familiares de las víctimas, por expreso deseo de éstos.
La repatriación de los restos mortales de los fallecidos en el accidente arrancó el pasado 10 de junio, cuando Luthansa trasladó los restos de las víctimas de nacionalidad alemana hasta la ciudad de Duesseldorf, a la que se dirigía el vuelo accidentado. En el siniestro murieron las 150 personas que se encontraban a bordo del avión, entre ellas 72 alemanes y 51 españoles.
Las autoridades judiciales francesas creen que el copiloto estrelló de forma deliberada el aparato en un momento en el que el piloto había abandonado la cabina. El copiloto, de 27 años, sufría al parecer una depresión y había ocultado a la empresa una baja ordenada por un médico.
