Recuperadas las cajas negras del A330 de Air France que cayó en el Atlántico

El registrador de voces CVR estaba a 4.000 metros de profundidad
Las dos cajas negras (CVR y FDR) del Airbus A330 de Air France que se estrelló en el Atlántico el 1 de junio de 2009 cuando volaba de Rio de Janeiro ya han sido recuperadas y viajan en estos momentos con destino a la sede de la BEA (Bureau d’Enquêtes et Analyses), en el aeropuerto parisino de Le Bourget a fin de ser analizadas. Aparentemente, por las imágenes divulgadas por la BEA, las cajas se encuentran en buen estado y parecen haber resistido bien el paso del tiempo.

Seguimiento de la recuperación de las cajas negras
Se encontraban a una profundidad de entre 3.900 y 4.000 metros y han sido recuperadas por el robot Remora 6000. Se depositaron en el barco «Ille de Sein», para ser posteriormente transferidas a una patrullera de la Marina de Francia, que las transportará a Cayena (Guayana) para ser después enviadas en avión a Francia.

La previsión es que lleguen a Le Bourget aproximadamente dentro de 10 días, momento en que los expertos de la BEA, en presencia de miembros de la policía judicial, iniciarán el examen del CVR (Cokpit Voice Recorder), que se localizó el pasado 27 de abril, y del FDR (Flight Data Recorder), que se extrajo del mar el 1 de mayo.

Sellado de los recipientes que contienen las cajas negras
El CVR registra las comunicación de voz entre los pilotos y el FDR guarda los parámetros del vuelo. El primer examen debería determinar con relativa rapidez si los datos almacenados se conservan en buen estado. Después, se procederá a una segunda lectura en un laboratorio especializado de la Delegación General de Armamento (DGA).

La recuperación de las cajas negras ha generado una gran expectación en el sector aeronáutico francés, en cuyo seno aumentan las esperanzas de poder esclarecer las causas de la tragedia, que causó la muete a 216 pasajeros y 12 miembros de la tripulación.

Las imágenes de la recuperación de las cajas negras y las últimas informaciones se pueden seguir en esta página www.bea.aero.

Texto: José Fernández – Fotos: BEA

Comparte esta noticia