En un acto celebrado en conmemoración de la patrona de la aviación, Nuestra Señora de Loreto, la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) inviste 34 doctores y entrega diplomas a más de 200 egresados en las diferentes titulaciones impartidas en la ETSIAE.
«Por cuanto habéis acreditado vuestro saber y doctrina, se os ha considerado dignos de obtener el supremo grado académico», con estas palabras el rector de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), Guillermo Cisneros, iniciaba el solemne acto de investidura de nuevos doctores. Uno a uno, los 34 doctores, con sus respectivos padrinos, presentaban su birrete al rector, quien se lo imponía para a continuación efectuar juramento o promesa y recibir los símbolos acreditativos de su nuevo estatus.
El rector les recordó la responsabilidad adquirida en ese acto, «ahora sois generadores y transmisores de conocimiento, bienvenidos a la vida académica». De los 34 nuevos doctores, 11 han obtenido conjuntamente la mención internacional, que acredita que durante su etapa formativa han realizado una estancia mínima de tres meses fuera de España en una institución de enseñanza superior o centro de investigación de prestigio.
Además, recibieron el premio extraordinario tres doctores que leyeron sus tesis en el curso 2014-2015 por la relevancia de las mismas. Son: Sergio Ávila, Marcos Latorre y Gonzalo Rubio. Actualmente los tres son profesores (ayudante doctor) en la ETSIAE.
Ingenieros, creando futuro
Tanto el acto de investidura de doctores como el de entrega de diplomas de los titulados estuvieron presididos por el rector de la UPM, al que acompañaron otras autoridades de la Universidad, el Jefe del Estado Mayor del Ejército del Aire, Javier García Arnáiz; el subdirector general de Sistemas de Navegación Aérea y Aeroportuarios de la Dirección General de Aviación Civil (Ministerio de Fomento), Jesús Pérez Blanco, y la decana del Colegio Oficial de Ingenieros Aeronáuticos, Estefanía Matesanz Romero.
La conferencia central corrió a cargo de Miguel Ángel Morell, director de Ingeniería de Aviones Militares de Airbus (Defence&Space), que utilizó la Odisea de Ulises como analogía para explicar el periplo que han pasado los egresados hasta llegar al este día de culminación. Pero no sólo como “algo épico” para ellos, sino también «como un viaje con aventuras adversas y favorables, que os ha abierto un océano de oportunidades, que tendréis que navegar contando con la inteligencia, las herramientas y los conocimientos que os ha dado esta Escuela».
Transmitió a los asistentes un mensaje de ilusión y optimismo, motivador para afrontar los nuevos desafíos del mundo cambiante con el poder de tecnologías como estas: tecnología de la información, inteligencia artificial, robótica, automatización, sensores, realidad virtual, electrificación, digitalización, impresoras 3D, grafeno, hipervelocidad, misiones espaciales, nanotecnología y biotecnología…»
«En esta revolución estaréis vosotros. Los ingenieros aeronáuticos cambiaréis nuestras vidas, aunque no os deis cuenta ahora».
Confluencia de titulaciones
En total, recibieron sus diplomas 206 egresados, de ellos 180 con las atribuciones profesionales para ejercer la profesión de Ingeniero Aeronáutico que al mismo tiempo obtuvieron las distinciones del Consorcio Europeo Pegasus (99 pertenecientes al Plan 2000 y la 82ª promoción de Ingeniero Aeronáutico de la ETSIA y 81 conformando la I promoción del Máster Universitario en Ingeniería Aeronáutica, MUIA, conforme al Espacio Europeo de Educación Superior).
En este acto conmemorativo de la patrona de la aviación, Nuestra Señora de Loreto, confluían, por tanto, un plan de estudios que está en proceso de extinción (Plan 2000) y que «cerrará su ciclo a mediados de 2018» con otro que acaba de egresar a su primera promoción y que supone «la culminación de un proyecto educativo, de grado más máster, iniciado 7 años atrás». Junto a ellos y con la Escuela como nexo de unión, recibían sus diplomas, los 21 integrantes la I promoción del Máster Universitario en Sistemas de Transporte Aéreo (MUSTA) y los 5 componentes de I promoción del Máster Universitario en Sistemas Espaciales (MUSE), éste último dependiente del Instituto de Microgravedad Ignacio Da Riva (IDR). Ambas son titulaciones oficiales por la UPM.
El director de la ETSIAE felicitó a los egresados por «finalizar unos estudios complejos, que capacitan para una profesión excitante, en un sector pujante, que trabaja con alta tecnología y genera gran actividad». Todos los intervinientes en el evento coincidieron en subrayar que representaban «l futuro de la industria aeroespacial», y entre los valores que destacó el director en funciones de la ETSIA de los nuevos titulados están: «tenacidad, entrega y capacidad de superación».
En el apartado de los consejos para la etapa profesional, se habló de «ser humildes y proactivos, de vacunarse de la soberbia y la prepotencia y de preferir la simbiosis a la competencia».
Ginés Moreno, alumno con el mejor expediente de la I promoción de MUIA, tomó la palabra en representación de los estudiantes y recordó a sus compañeros que «una nueva etapa se abre ante nosotros, ahora decidiremos hacia dónde ir con nuestro sueños».
Un valioso equipaje
Por su parte, el rector de la UPM les pidió que recuerden siempre de dónde vienen y se sientan preparados: «salid al mundo sin miedo, lleváis el equipaje de una Escuela puntera en investigación y docencia».
Asimismo, Cisneros sostuvo que «los profesores tenemos la obligación de proporcionar las oportunidades a los estudiantes para adquirir en primer lugar una formación básica, primordial, y luego una especialización de lo que en ese momento sea puntero, pero sabiendo que quedará obsoleto en un plazo de tiempo que cada vez es más breve, puesto que los ciclos de conocimiento en ingeniería son cada vez más cortos».
Apoyo del sector
Las empresas del sector Airbus, Caja de Ingenieros, Gamesa, GMV, Indra, Ineco, Isdefe e ITP mostraron su apoyo a la Escuela y la UPM y premiaron la valía, el esfuerzo y la excelencia de los titulados con los mejores rendimientos académicos de cada promoción y especialidad. “Es parte del ADN de la UPM la participación de la empresa en el tejido de la Escuela, que se traduce en innovación, transferencia de conocimiento y emprendimiento de éxito”, afirma el rector.
La Escuela también tuvo un reconocimiento al personal (PDI y PAS) tanto a los que llevan trabajando 20 años en ella como a los que recientemente se han jubilado para «agradecer su dedicación y entrega».