La revelación ayer por prestigiosos medios internacionales de las actividades de conocidos personajes públicos relacionadas con sus fortunas y el uso de paraísos fiscales, ha permitido conocer que el piloto de Fórmula 1 Lewis Hamilton se ahorró pagar cuatro millones de euros en impuestos por la compra de su jet privado, un Bombardier Challenger 605.
Según informó ayer el diario francés Le Monde , la operación de compra la realizó en 2012 y la gestionaron sus representantes a través de la Isla de Man, conocido paraíso fiscal. Hamilton se habría ahorrado los cuatro millones de euros correspondiente al IVA. El diario francés califica la operación de «hábil montaje en la frontera de la legalidad», según revelan documentos de ‘Paradise Papers’. Hamilton tiene nacionalidad del Reino Unido pero su residencia está en Mónaco, obviamente por razones fiscales.
En cualquiera de estos dos países podía haber registrado la compra del jet, valorado en 21 millones de dólares, pero prefirió hacerlo en la isla de Man, que goza de un peculiar estatus fiscal y jurídico en el conjunto del Reino Unido.
Para ampliar la información sobre este asunto se puede leer la noticia que publica el diario The Guardian, titulada: «Lewis Hamilton avoided taxes on £16.5m jet using Isle of Man scheme»