La fotografía que tiene ante sus ojos fue tomada en el planeta Marte por el rover Curiosity, que se posó allí el 6 de agosto de 2012, y ha recorrido más de 78 millones de kilómetros antes de llegar a su pantalla.
Entre otras cosas muestra en el centro de la imagen, sobre el rover, la antena hexagonal fabricada por Astrium –la primera empresa europea de la industria astronáutica– que envía a la Tierra los datos científicos recogidos por el robot.