Durante la Guerra Civil, Cataluña fue el escenario de una guerra sin tregua donde se experimentan nuevas tácticas y estrategias, tanto en el campo de batalla como en la retaguardia.
La voluntad de resistencia republicana, con pocos recursos, tuvo que hacer frente a las fuerzas franquistas, que aplicaron una sofisticada maquinaria bélica contra todo el territorio.